Sólo el ojo lo sabe.
Un cristal incansable paso a paso repite
las rectas sombras que la tarde desplaza.
Terriblemente dócil, no desdeña
la vertical sinuosa de una hormiga extraviada
y al fondo de sus cámaras
también crecen las plantas.
A veces miro ese país extraño
cuyos hombres no tienen más lenguaje que el gesto,
ese país sin música.
Sé que no puedo ser ese hombre que me mira,
sé que a él no lo alcanzan el temor ni la idea.
Cuando la noche apaga las letras y los ángulos,
en su país de eclipses él no te ama.
6 comentarios:
La poesía de Ospina (región en este caso para nada dócil) nos devuelve (en el lenguaje de los espejos) gestos, contradicciones y eclipses, sin música. Genial.
La verdad es que no sé muy bien qué quiso decir Ospina en este poema, pero "suena" bien.
Eso siempre. Ospina, un compositor de gran sonoridad.
Tampoco sé muy bien que quiso decir Ospina pero os recuerdo que un día como hoy ( ayer) nacía en 1898 nuestro gran poeta universal Federico García Lorca. Hasta mañana...
Brindo por él, Agostina. Buena info.
Para siempre presente en la poesía universal.
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