con su pericia extremada,
de mármol, según algunos,
hizo su preciosa estatua,
quedó tan enamorado
que con ella se casara:
y Pandora fue la madre
de toda la raza humana.
Desde que ella pudo verse
y conocer la importancia
de su risita halagüeña,
su dulce hablar y su cara
trigueñita y seductora,
afectó que sólo amaba
a su esposo, y Prometeo
sólo pensaba en amarla;
primer marido, por tanto,
que asombrado vio poblada
de cuernos toda su frente.
Marte visitó a esta maja.
El brillo de un dios, su casco
de oro, su guerrera planta,
su estilo marcial... en suma,
Marte la gozó, y deo gracias.
El dios de la mar sabiendo
que el otro tuvo tal ganga,
busca a Pandora, y de amores
muy tiernamente le habla:
quien cede a Marte, no deja
a Neptuno con las ganas.
El resplandeciente Febo
que los vio, tuvo esperanza
de ser también socorrido.
Preséntase, y ella nada
negar pudo al dios del día,
de los versos e ilustradas
bellas artes. Y Mercurio,
que es de la elocuencia el alma,
supo hablar, y parte tuvo.
Vulcano, dios de las fraguas,
viene, y ella a los principios
le desprecia y lo maltrata;
mas, al fin, importunando,
consiguió también gozarla.
Así sus hermosos años
Pandora alegre ocupara,
y se fastidió después
sin que supiera la causa;
mas cuando su primavera
una mujer así pasa,
jamás hará ya otra cosa.
En cuanto a los dioses, aman,
pero su amor dura poco;
y así, todos la gozaran,
y la dejaron al punto;
por lo que desesperada
a un sátiro corpulento
por postres metió en su cama.
Ésta es la ascendencia noble
de todos y la prosapia,
siendo aquestos pasatiempos
origen de nuestra raza.
He aquí por qué diferimos
en espíritu, en hazañas,
en talentos, en pasiones,
en empleos y circunstancias.
El uno tuvo por padre
al cojo dios de las fraguas;
otro a Marte; otro a Neptuno;
y otro al sátiro; y la gracia
de descender tienen pocos
del dios de la luz preclara.
Así de nuestros parientes
todos los gustos pasaran
a su humana descendencia.
Mas el oficio, que ufana
la bella Pandora tuvo,
es el más dulce, y agrada
tanto en París que lo honran
todos como cosa santa.
Mas también llegará un día
en que cerrada la Caja,
el Amor y la Justicia
tendrán en el mundo morada.
Versión de Mauro Armiño
10 comentarios:
Para caja de truenos, la de ayer en el Bernabeu...
Pobres merengues, hombre, todo el Universo contra ellos, qué injusticia, je, je...
Vamos, que venimos todos de la misma madre (y qué madre -seguro que era natural de Siracusa y se llamaba Eva-) pero de distintos padres (y qué padres) La continuación de la raza tuvo que ser necesariamente una endogamia en toda regla.
Y encima seguimos preguntándos sobre "de dónde venimos"
Voltaire estuvo muy socorrido en la sátira.
Pues yo me voy a sacar de la manga el Mito de Pachorra, que ya está bien siempre con la misma historia:) Claro, es que ella se puso "ofrecida" y ellos se vieron "obligados". Entonces ¿cuál es el sexo débil? ¿El que se ofrece o el que no resiste la tentación?
Más luego, ¿la gozaron todos y ella no gozó nada?
Tiene algo que ver Messi entre tantos dioses?
En realidad, se llamaba Evarista, pero la llamaban Eva, y seguramente ella gozaba de lo lindo, y luego se comía manzanas y cosas.
Messi, entonces, como ahora, era el dios supremo, viste?
Eso tienen los dioses. No son definitivos.
Bueno, dejando a un lado a las Evaristas&Evaristos y hablando de oficios, os habéis fijado en que una gran mayoría de los oficios están originados por las "imperfecciones" humanas.
En un "mundo perfecto" no sé de qué podría vivir mucha gente.
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