sobre la arquitectura destos huesos
carne y cabellos, por quien fueron presos
los ojos que, mirándola, detuvo.
Aquí la rosa de la boca estuvo,
marchita ya con tan helados besos;
aquí los ojos de esmeralda impresos,
color que tantas almas entretuvo.
Aquí la estimativa en que tenía
el principio de todo el movimiento,
aquí de las potencias la armonía.
¡Oh hermosura mortal, cometa al viento!,
¿donde tan alta presunción vivía,
desprecian los gusanos aposento?
7 comentarios:
Hablando de rosas marchitas, supongo acudirás a la manifestación entonando fervorosamente, junto a los representantes sindicales y otros liberados por e bien del trabajador, esa que dice: "a las mariscadas, a las mariscadas, por el triunfo de......."
... la digestión".
Pues no, lo siento, prefiero celebrar el Día Internacional del Jazz, que es tal que ahora.
Sabías palabras.....
C'est la vie. Hoy aquí, mañana allí.
Y pasado mañana, chi lo sa...
Pasado mañana...espera, que miro la agenda, a ver...no, no tengo cita con esa señora, pero igual se presenta por sorpresa, que es muy suya.
Con no hacerla caso...
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