domingo, 30 de abril de 2017

Correspondencia/ 1 - Rainer Maria Rilke - República Checa (Imperio austrohúngaro) / Lou Andréas-Salomé - Rusia


RILKE A LOU ANDREAS-SALOME, EN GÖTTINGEN

París, sábado 20 de junio de 1914

    Lou querida, he aquí un extraño poema escrito esta mañana, que te envío ahora mismo, y al que espontáneamente he titulado "Wendung" porque representa el viraje decisivo que se producirá probablemente con toda necesidad si tengo que vivir, y comprenderás en qué sentido lo concebí.
    Tu carta en respuesta a mi estudio sobre las "Muñecas" la había presentido, suponiendo que me escribirías una de consuelo, que manifestara una impresión apropiada para ordenarlo. Y, en efecto, comprendo perfectamente lo que reconoces en ella, así como la última frase que las "palabras" son incapaces de expresar, esa última frase con relación a la unidad que la muñeca forma con lo corporal y sus más horribles fatalidades.
    Pero, qué espantoso que uno escriba semejante cosa sin darse cuenta de nada, so pretexto de hablar de un recuerdo de la más original intimidad, y que a continuación deje uno la pluma con ansias de revivir una vez más lo fantasmal, pero de manera ilimitada como nunca antes lo había hecho; hasta que, lleno a rebosar de estopa el cuerpo de títere en que uno mismo se ha convertido, se quede con la boca reseca.
                              Tu

VIRAJE DECISIVO

"El camino que lleva de la intimidad
a la grandeza pasa por el sacrificio".
Kassner

Lentamente se la ganó con la mirada en reñida lucha.
Los astros doblaban la rodilla
bajo la violencia de sus ojos alzados.
O volvía a contemplar arrodillado,
y el perfume de su insistencia
doblegaba algo divino,
ella le sonreía, adormecida.
Las torres que así contemplaba, se estremecían:
edificadas otra vez, hacia las alturas, de un vistazo.
Mas cuán a menudo, de día
sobrecargado, el paisaje, al anochecer
reposaba, tendido sobre su silencioso percibir.

Los animales entraban confiados
en la abierta mirada, paciendo,
y cautivos los leones
los observaban con sus ojos fijos cual una libertad inconcebible;
unos pájaros lo atravesaban con su vuelo,
a él, el insensible; unas flores
se reflejaban en él
grandes como en un alma infantil.

Y el rumor de que existía un contemplativo tal
conmovía a los menos
improbablemente visibles,
conmovía a las mujeres.

¿Mirando desde hace cuánto tiempo?
¿Desde hace cuánto tiempo privándose ya íntimamente
suplicando en el fondo de la mirada?
Cuando él, que vivía en la espera, un país extranjero,
sentado en la habitación de un albergue,
sentado en la habitación dispersa, alejada de él, que
lo rodeaba de un ambiente taciturno, y en el espejo evitada
de nuevo la habitación,
y más tarde, vista desde el fondo de su torturadora cama, otra                                                                                     [vez
la habitación: entonces deliberaba esto al vacío,
imperceptiblemente, deliberaba a propósito de su corazón                                                                                     [sensible,
en el fondo de su cuerpo transtornado de dolor,
de su corazón a pesar de todo sensible,
esto deliberaba y juzgaba ese corazón:
no poseía nada del amor.
(Y le eran rechazadas nuevas consagraciones).
Ya está, se ha puesto un límite a la mirada.

Y el universo mirado
quiere alcanzar su plenitud en el amor.
La labor de la vista está hecha,
haz en adelante la labor del corazón
con respecto a tus imágenes, esas imágenes cuativas; pues tú
las habías vencido: pero sigues sin conocerlas.
Mira, hombre interior, tu interior muchachita
conquistada en reñida lucha
contra mil naturalezas,
esa criatura sólo conquistada, todavía no amada.
20 de junio


LOU ANDREAS-SALOME A RILKE, EN PARIS

Göttingen, 24 de junio de 1914, miércoles

    Después de dos días de ausencia (para ir a hablar con alguien) estoy de regreso hoy, e íntegramente con tus palabras y a solas con ellas ante este "viraje decisivo" que lo es y sin embargo ya no lo es, pues se preparaba desde hace mucho tiempo, casi realizado ya: tu cuerpo lo sabía, por decirlo así, antes que tú mismo, pero claro, del modo en que los cuerpos pueden saber -con una fidelidad, una rectitud infinitas, de manera que ello debía conducir a un nuevo malentendido con el espíritu por algún tiempo. ¿Sabes en qué podía reconocerse?. En los ojos, ellos, que miran, que conquistan la figura única de mil matices que "todavía no había sido amada"; los ojos que querían amar transgredieron el límite que les fue impuesto y (¿te acuerdas de lo que me habías dicho?) los ojos celebraron nupcias en una mirada, no sólo en sentido poético sino, a decir verdad, en el sentido más corporal, hasta la agitación de la sangre, como si en aquellos momentos se hubiese producido mucho más que una simple mirada. (Así fue en el caso de la muchachita que se miraba en tus ojos como en un espejo, mientras se arreglaba; así, en otros casos más personales). Pero, en cuanto a los ojos, abandonados al esfuerzo de su búsqueda, más allá del límite de lo que habitualmente sólo debieran llevar al espíritu, en su ver sólo podían hacerse cada vez más corporales y, en cierto modo, aprovechándose de confusiones con hechos acaecidos (procesos subterráneos que no se realizaban en la superficie del cuerpo, dispuesta hacia lo exterior), sólo podían conocer extraños tormentos; pues la "labor del corazón", al contacto con lo que no había sido más que un ver artístico, sólo podía realizarse a partir del fondo más interior. Así fue cómo ocurrió que, por ejemplo la sangre afluyera a los ojos en forma de congestión, determinando dolorosas presiones; como si el flujo tendiera, por error, a transformar los ojos en órganos genitales, a transformarlos en aquello mismo de lo que proceden los milagros corporalmente generadores; y sufrían, en la lucha de su sincero esfuerzo, que sólo los conducía a una disensión con el cuerpo, en lugar de procurarle la calma. Hasta que el corazón se puso a latir al ritmo del gran amor en el cual lo exterior y lo interior se unen, el amor que, de repente, se da cuenta de todos sus tesoros y los examina como a las novias.
Lou
Traducción de José Mª Fouce

viernes, 28 de abril de 2017

Imágenes rotas - Teresa Calderón - Chile


&

    La vida: el gran laboratorio de la muerte plagado de tristes ratas.

&

    Abrían sus fauces los camiones de la tarde.
    Todo se lo tragaban. La lozanía de la fruta participando del misterio y de la muerte.

    Convincente la escoba barriendo la piel de los huesos tatuados por el pavimento y tendones estallando y cartílagos sangrientos y briznas de pasto y ramas secas recolectadas en la caída.

    El más grande de los desperdicios mi pobre basura biodegradable entrando en la ambulancia.

&

    Podríamos considerar a la hora de los descargos el temblor matutino la naúsea el desconsuelo abriendo sus brazos cada día la prepotencia urgente del deseo.

&

    Desde los ojos poblados de presagios sólo existe la ventana abierta engañosa como un cuadro de Magritte.

&

Esta no es una pipa.
Este no es un hombre
Esta no es una ventana abierta
por donde cae el hombre de la pipa
Esta no es una forma de morir
Esta no debiera ser la vida.

&

¿Cielo?
¿Infierno?
¿A qué estado de nada
a qué mazmorras
irán a dar los espantados
los muertos de miedo
los que tienen perdida la fe
los atorados con el trago amargo
de sus propios pasos perdidos
los aterrados de la vida por delante
los jóvenes poetas aspirantes
al suicidio?

&

    ¿Qué mensaje oculto traía escrito la botella calibre 38 que no pude descifrar a tiempo?

&

    Salió cara la gracia de convertir el agua en vino.

&

    Perdónalo, Señor, porque sabe perfectamente lo que hace.

&

    En lugar de llorar junto al cuerpo derramado recuerdo a Humphrey Bogart en la ninguna película de su lecho de muerte enronquecido por el cáncer laríngeo el gángster más querido de Hollywood el matón adorable confesándose con Frank Sinatra lo único que va bien es mi cuenta bancaria. Para qué más.

&

    Irás. Volverás. Nunca en la Guerra. Perecerás.

&

    Tu aversión a la vida tiene tantas razones que ninguna razón conoce.

&

    La vida privada es un asunto público.

&

    Quién puede comprender este espectáculo si no es como la ofrenda de un cuerpo regresando a la tierra de donde nunca debió salir.

&

El suicidio
como dijo el actor
es una muerte
en defensa propia.

&

Teníamos
un
futuro
por 
delante

Yo sólo veo huesos
y
carne
que
se
pudre.

&

La arbitrariedad del signo lingüístico
La arbitrariedad de la muerte
A qué sistema de signos
debo acudir para el consuelo.

&

La vida es cruel y es mucha.
De Imágenes Rotas, 1995

miércoles, 26 de abril de 2017

Menosprecio de corte y de aldea - Miguel d'Ors - España


A Kurt Spang
Moça tan fermosa
non vi por los salones de Llongueras (Coiffeur)
como tú, rusoniana, que entregaste
la mitad de tu reino
y tres horas y cuarto de un otoño
por aquella estudiada,
delicada, difícil, laboriosa
ausencia de peinado.

Botas de ordeñadora Saint-Laurent,
andrajos millonarios por las faldas,
maquillaje que con sutiles artificios
imitaba la falta de maquillaje,
                                rauda
te vi partir, ya pura Galatea,
por la escondida senda
de tus desaforadas discotecas.

Sintiéndote tan moza y tan garrida,
sintiéndote tan pueblo-pueblo-pueblo,
tan paisana de una vaga mitología
de bieldos, sementeras, cabañuelas y trovos,
tan natural, tan fresca, tan lozana
y tan sencilla como (más o menos)
un pâté d’oignons fumé avec des petits pois à l’armagnac.
De Es cielo y es azul, 1984

lunes, 24 de abril de 2017

Leyenda guaraní sobre la Creación - Anónimo - Paraguay-Nordeste de Argentina-Bolivia-Sur de Brasil


El verdadero Padre Xamandu, el Primero, de una pequeña porción de su propia divinidad, de la sabiduría contenida en su propia divinidad, y en virtud de su sabiduría creadora, hizo que se engendrasen llamas y tenue neblina.

Habiéndose erguido de la sabiduría contenida en su propia divinidad, y en virtud de su sabiduría creadora, concibió el origen del lenguaje humano.

De la sabiduría contenida en su propia divinidad, y en virtud de su sabiduría creadora creó nuestro Padre el fundamento del lenguaje humano e hizo que formara parte de su propia divinidad.

Antes de existir la tierra, en medio de las tinieblas primigenias, antes de tenerse conocimiento de las cosas, creó aquello que sería el fundamento del lenguaje humano e hizo el verdadero Primer Padre Xamandu que formara parte de su propia divinidad.

Habiendo concebido el origen del futuro lenguaje humano, de la sabiduría contenida en su propia divinidad, y en virtud de su sabiduría creadora, concibió el fundamento del amor.

Antes de exirtir la tierra, en medio de las tinieblas primigenias, antes de tenerse conocimiento de las cosas, y en virtud de su sabiduría creadora, concibió el origen del amor.

Habiendo creado el fundamento del lenguaje humano, habiendo creado una pequeña porción de amor, de la sabiduría contenida en su propia divinidad, y en virtud de su sabiduría creadora el origen de un solo himno sagrado lo creó en su soledad.

Antes de existir la tierra, en medio de las tinieblas originarias, antes de conocerse las cosas, creó en su soledad el origen de un himno sagrado.
Versión de Helena Galiana

sábado, 22 de abril de 2017

Oda a la soledad - José Ángel Valente - España


Ah soledad,
mi vieja y sola compañera,
salud.

Escúchame tú ahora
cuando el amor
como por negra magia de la mano izquierda
cayó desde su cielo,
cada vez más radiante, igual que lluvia
de pájaros quemados,
apaleado hasta el quebranto, y quebrantaron
al fin todos sus huesos,
por una diosa adversa y amarilla.

Y tú, oh alma,
considera o medita cuántas veces
hemos pecado en vano contra nadie
y una vez más aquí fuimos juzgados,
una vez más, oh dios, en el banquillo
de la infidelidad y las irreverencias.

Así pues, considera,
considérate, oh alma,
para que un día seas perdonada,
mientras ahora escuchas impasible
o desasida al cabo
de tu mortal miseria
la caída infinita
de la sonata opus
ciento veintiséis
de Mozart
que apaga en tan insólita
suspensión de los tiempos
la sucesiva imagen de tu culpa.

Ah soledad,
mi soledad amiga, lávame,
como a quien nace, en tus aguas lustrales
y pueda yo encontrarte,
descender de tu mano,
bajar en esta noche,
en esta noche séptuple del llanto,
los mismos siete círculos que guardan
en el centro del aire
tu recinto sellado.
De Mandorla, 1982

jueves, 20 de abril de 2017

Poesía del vino/ 26 - Elogio del vino - Kisai - Persia


    Abre los ojos y mira la flor del fenogreco, brillante como una joya en medio del trigo verde, como un ser amado que, con la mejilla sonrosada, ha echado sobre su rostro un velo de seda verde. ¡Qué hermoso el néctar de los rayos del sol cuando su reflejo penetra en el vino! La copa es azul, el vino rojo, los rayos amarillos: se diría que era un fenogreco, violeta y tulipán. Esta claridad que en la copa se insinúa es como cornalina instalada en las perlas. Por esa transparencia y esa pureza, cuando tomas este vino no puedes distinguir la copa del vino, ni de tu mano la copa.
Traducción de Leonor Vernet
sobre la versión francesa de Henri Massé
Kisai

Kisai, nacido en Merv, gozó del favor de los príncipes samánidas y de Mahmud el Gaznaví, al que alabó en sus panegíricos. Por otra parte, chií y con tendencias al ascetismo, exaltó en sus versos a Alí y a la familia santa, si bien celebró el vino en otros versos (tal vez en un sentido místico). Su lengua y su estilo son de los más notables. De su obra no se conservan más que algunos fragmentos. Posiblemente murió después de 1002, fecha indicada por los autores de antologías.

martes, 18 de abril de 2017

Poetas del al-Andalus/Sefarad/ 23 - Qasida Maqsura (fragmentos) - Hazim al-Qartayanní - al-Andalus


El tiempo se repartía según las estaciones,
trasladándose de un lugar a otro,
como las estrellas errantes del cielo.
El invierno se pasaba en Cartagena, resguardada
de los vientos por los altos montes, junto al mar.
El verano en la fértil vega de Murcia, a la sombra de los árboles                            [cuajados de frutos, entre alcázares y puentes.
La primavera en los campos, prados y colinas regados por las                                                                     [primeras lluvias.
El otoño en los baños termales, de los que tanto goza el levante                                                                               [español.

~~~~
El mejor lugar para pasar el invierno, en la orilla de   un
                               [mar, entre cañas, cúpulas y casas.
Para pasar el verano, a las orillas de un río, entre palacios,                                                            [puentes y poblados.
Para pasar la primavera, lugares por donde se desliza el
                       [agua sobre praderías, llanuras y colinas.
Y para el otoño, lugares de aguas, o alhamas, entre árboles                                                                [castillos y caseríos.

En Murcia se reflejan los árboles en las aguas cristalinas del río.
Y pasábamos el tiempo comprendido entre almuerzo y cena
descubriendo los deseos de nuestras almas, mientras las
                                  [aves nos maravillaban con sus trinos.
O dejando rodar palabras bellas, como piedras preciosas,                                                             [en noches de luna llena.
Embriagándonos con el aroma de los árboles y flores,                                                             [mientras el alba despertaba.

~~~~
Y ahora nuestras miradas contemplan jardines rodeados                                                        [de acequias y estanques.
Va desapareciendo el sol del atardecer, hasta que no se
                             [ve más que el borde de su corona.
Pero entonces alumbra nuestros ojos el resplandor de
                          [Qubbas, cuya luz nos indica el camino.
Traducción de Emilio García Gómez

domingo, 16 de abril de 2017

Microrrelatos/ 19 - Quijotescas/ 31 - Crueldad de Cervantes - Marco Denevi - Argentina


    En el primer párrafo del Quijote dice Cervantes que el hidalgo vivía con una ama, una sobrina y un mozo de campo y plaza. A lo largo de toda la novela este mozo espera que Cervantes vuelva a hablar de él. Pero al cabo de dos partes, ciento veintiséis capítulos y más de mil páginas la novela concluye y del mozo de campo y plaza Cervantes no agrega una palabra más.

viernes, 14 de abril de 2017

Exposición de las xilografías realizadas por Salvador Dalí para la Divina Comedia de Dante en La Casona de Reinosa


El universo de Dante

La Divina Comedia es una de las obras fundamentales de la transición del pensamiento medieval al renacentista. El primer punto que debemos destacar es el carácter alegórico de la composición. Por ejemplo, la presencia del número 3, que simboliza la Santísima Trinidad (3 son los reinos que visita Dante, 3 las fieras que aparecen en la Selva Oscura, 3 los rostros de Lucifer, la estrofa utilizada es el terceto, 3 los protagonistas principales de la obra: Dante que simboliza el pecado; Virgilio, la razón y Beatriz, la fe...)

[...] En la obra, Dante finge hacer un viaje imaginario comenzando su peregrinación por el Infierno, para más tarde atravesar el Purgatorio hasta llegar al Paraíso.

La ilustración de Dalí

Muchos han sido los ilustradores de este poema, entre ellos Botticelli, Miguel Ángel, Gustave Doré, en los últimos tiempos Miquel Barceló. Pero Dalí, a pesar del profundo conocimiento de la obra de Dante, no se limita a ilustrar los versículos sino que, partiendo de ellos, se sumerge en una recreación psicoanalítica de la obra que parte de las teorías freudianas, dejando aflorar libremente su universo personal. Mediante la aplicación del método paranoico-crítico, plasma sus obsesiones y motivos recurrentes, uniendo el impulso surrealista a la aplicación de técnicas y estilos del Renacimiento y el Barroco.

La ilustración de la Divina Comedia fue un encargo hecho a Dalí por el gobierno italiano con motivo del 700 aniversario del nacimiento de Dante. Sin embargo, la polémica suscitada por no ser encargado a un artista italiano abortó el proyecto. Pero Dalí ya había empezado a realizar 100 acuarelas. A pesar de ello y a instancias del papa Pío XII, y con el auspicio de Joseph Foretquien, Dalí abordó la tarea de transferir esas 100 acuarelas originales a 3500 tacos xilográficos, uno por cada color. Para esa labor se utilizaron entre 30 y 40 planchas por cada acuarela.

La técnica xilográfica consiste en que, a partir de la acuarela original, cada color se plasma en una plancha. En el proceso de grabación la superposición de dos colores crea un nuevo color, por lo que los grabadores hubieron de prestar una atención minuciosa a la perfecta superposición de las planchas coloreadas para que aparecise el color dado a los originales. Esta técnica, especialmente difícil y laboriosa, estuvo supervisada en cada uno de sus pasos por el propio Dalí durante los más de 4 años que duró el trabajo. [Del impreso informativo de la exposición]

La exposición

Formada por 67 de los 100 cuadros que constituyen la obra íntegra, ilustra dos de las tres partes en las que se estructura el poema de Dante: Infierno y Paraíso, quedando al margen el Purgatorio. La muestra ha sido cedida por la obra cultural de la Fundación Universitaria Iberoamericana (Funiber), con sede en más de 30 países, y patrocinada por la Universidad Europea del Atlántico, el Año Jubilar Lebaniego 2017 y el Ayuntamiento de Reinosa. Podrá verse en la Sala de Exposiciones de La Casona hasta el 30 de abril. Les aconsejo que no se la pierdan. Para abrir boca, aquí tienen una pequeña selección de esas xilografías, acompañadas de los versos de Dante -traducidos por Ángel Crespo- y la música de Robert W. Smith.


Infierno


guardai in alto, e vidi le sue spalle
vestite già de' raggi del pianeta
che mena drito altrui per ogne calle

al mirar a la cumbre, vi que estaba
vestida de los rayos del planeta
que el buen camino a todos señalaba


Cerbero, fiera crudele e diversa,
con tre gole caninamente latra
sovra la gente che quivi è sommersa.

Cerbero, fiera cruel y diferente,
caninamente ladra con tres voces
por sobre aquella sumergida gente.


Qui vid'i' gente piú ch'altrove troppa,
e d'una parte e d'altra, con grand'urli,
voltando pesi per forza di poppa.

Más almas en tal sitio se congregan
que en los demás, y allí las vi afanarse:
empujan pesos, con el pecho bregan.


Uomini fummo, e or siam fatti sterpi:
ben dovrebb'esser la tua man piú pia,
se state fossimo anime di serpi".

Hombres fuimos y leña estamos siendo;
tu mano debió ser más bondadosa
aun con almas de sierpes contendiendo".


d'innanzi mi si tolse e fe' restarmi.
"Ecco Dite" dicendo, "ed ecco il loco
ove convien che di fortezza t'armi".

se detuvo ante mí, me hizo pararme
y dijo: "Mira a Dite; es el momento
de que tu alma de valor se arme":


Purgatorio


e canterò di quel secondo regno
dove l'umano spirito si purga
e di salire al ciel diventa degno.

y cantaré a la tierra purgadora
del alma humana, que hacia el cielo es vía
de la que se hace de él merecedora.


Da poppa stava il celestial nocchiero,
tal che parea beato per iscripto,
e piú di cento spirti entro sediero.

Estaba a popa el celestial barquero
que el ser beato en sí llevaba inscrito;
cien almas conducía al varadero.


O imaginativa che ne rube
tal volta sí di fuor, ch'om non s'accorge
perché dintorno suonin mille tube,

Oh fantasía que, de cuando en cuando,
arrebatas al hombre de tal suerte
que no oyera mil tubas resonando,


e vidi spirti per la fiamma andando;
per ch'io guardava a loro e a' miei passi
compartendo la vista a quando a quando.

y a sombras vi entre llamas caminando,
y aunque mi andar mis ojos vigilaban,
a ellas los dirigí de cuando en cuando.


Non aspettar mio dir piú né mio cenno:
libero, dritto e sano è tuo arbitrio,
e fallo fora non fare a suo senno:

per ch'io te sovra te corono e mitrio".

Ya mi tutela no andarás buscando:
libre es tu arbitrio, y sana tu persona,
y harás mal no plegándote a su mando,

y por eso te doy mitra y corona".


Paraíso


Nel ciel che piú de la sua luce prende
fu' io, e vidi cose che ridire
né sa né può chi di là sú discende;

Yo al cielo fui que más su luz reviste
y vi lo que, al bajar de aquella cima,
a poder ser contado se resiste;


Folco mi disse quella gente a cui
fu noto il nome mio, e questo cielo
di me s'imprenta, com'io fe' di lui,

Folco se me llamó en aquella esfera
que conoció mi nombre; y este cielo
de mí se sella, como de él yo hiciera,


Già si godeva solo del suo verbo
quello specchio beato, e io gustava
lo mio, temprando col dolce l'acerbo;

Ya se gozaba sólo de su verbo
aquel beato espejo, y yo templaba
en el mío lo dulce con lo acerbo;


tale dal corno che 'n destro si stende
a piè di quella croce corse un astro
de la costellazion che lí resplende;

tal, del cuerno que al lado diestro tiende,
al pie de aquella cruz se corrió un astro
de esa constelación que tanto esplande;


e la mia donna, piena di letizia,
mi disse: "Mira, mira: ecco il barone
per cui là giú si visita Galizia".

la dama mía, y llena de leticia,
me dijo: "Mira, mira: está llegando
el barón por el cual se va a Galicia".


La Divina Comedia - Robert W. Smith

miércoles, 12 de abril de 2017

Himno de Pan - Percy B. Shelley - Inglaterra


El Himno de Pan es un poema mitológico que el escritor inglés Percy Byshee Shelley compuso en 1820. Constituye la primera parte de un extraordinario duelo poético entre el dios Pan y Apolo, donde ambos intentan explicar sus respectivos papeles en la creación del mundo.

Pan, príncipe de los sátiros y de los faunos, es uno de los dioses más extraños de la mitología griega. Su apariencia no tiene nada que ver con la del resto de los dioses. Tampoco sus intereses ni su estilo de vida: Pan prefiere los bosques sobre el lujo del Olimpo, el vino de los campos sobre la ambrosía, los pastores, los ladrones y los mentirosos sobre los santos.


Hymn of Pan

I

From the forests and highlands
We come, we come;
From the river-girt islands,
Where loud waves are dumb
Listening my sweet pipings.
The wind in the reeds and the rushes,
The bees on the bells of thyme,
The birds on the myrtle bushes,
The cicale above in the lime,
And the lizards below in the grass,
Were as silent as ever old Tmolus was,
Listening my sweet pipings.

II

Liquid Peneus was flowing,
And all dark Tempe lay
In Pelion's shadow, outgrowing
The light of the dying day,
Speeded by my sweet pipings.
The Sileni, and Sylvans, and Fauns,
And the Nymphs of the woods and the waves,
To the edge of the moist river-lawns,
And the brink of the dewy caves,
And all that did then attend and follow,
Were silent with love, as you now, Apollo,
With envy of my sweet pipings.

III

I sang of the dancing stars,
I sang of the daedal Earth,
And of Heaven, and the giant wars,
And Love, and Death, and Birth--
And then I chang'd my pipings,
Singing how down the vale of Maenalus
I pursu'd a maiden and clasp'd a reed.
Gods and men, we are all deluded thus!
It breaks in our bosom and then we bleed.
All wept, as I think both ye now would,
If envy or age had not frozen your blood,
At the sorrow of my sweet pipings.


Himno de Pan
I

De los bosques y las tierras altas,
Venimos, venimos;
De los ríos y las lejanas islas,
Donde las olas rugen mudas
Para escuchar mi dulce flauta.
El viento en las cañas y los juncos,
Las abejas en las flores del tomillo,
Las aves en el mirto de los arbustos,
Los insectos sobre las rocas
Y los reptiles sobre la tierra,
Silenciosos como el viejo Tmolus1,
Escuchando mi dulce flauta.

II

El líquido Peneo2 continuó fluyendo,
Y oscuro yace el enorme Tempe3,
A la sombra de Pelión4, inmóvil,
La luz de un día moribundo,
Consolado por mis dulces notas.
Los Silenos, los Silvanos y los Faunos,
Y las Ninfas de los bosques y el mar,
Hasta la orilla húmeda del río llegan,
Hasta la oscura cueva llegan,
Sólo para escuchar fascinados,
Fueron silencio y fueron amor,
Escuchando atentos, sin un rumor,
Como tu lo estás ahora, Apolo,
Envidiando el canto de mi dulce flauta.

III

Le canté a las estrellas danzantes,
Le canté a la vieja Tierra,
Al cielo y de los gigantes su guerra,
Al Amor, a la Muerte y al Nacimiento,
Entonces cambié mi melodía,
Canté como bajo el velo de Menelao5
Perseguí a una doncella cambiada en cañas.
Dioses y hombres ¡todos somos ilusión!
Se quiebra nuestro seno y sangramos:
Todos lloraron; así como vosotros ahora,
Si la ira o la envidia no han congelado tu sangre,
Mientras oyes el lamento de mi dulce flauta.

1 Tmolus: dios de la montaña, esposo de Onfalia. Fue el encargado de juzgar la competencia musical entre Pan y Apolo.
2 Peneo: dios del río.
3 Tempe: valle de Tesalia.
4 Pelión: monte de Grecia donde vivían los centauros. Quirón, su rey, habitaba en la cumbre.
5 Menelao: héroe de la liga aquea contra los troyanos. Esposo de Helena.

lunes, 10 de abril de 2017

Poema de la palabra convertida en gato - Armand Gatti - Mónaco


[…]

Gatos de pelos erizados, rescatados de las revoluciones y que quisieran testimoniar en presencia del pasado histórico. Pero, ¿sobre qué?
Gatos misterios que no están instruidos en letras ni en medicina ni en ciencias veterinarias, y que encuentran su destino en la concordancia de los participios.
Gatos huellas de los fundadores del Popol Vuh en la página: sonidos de hojas que corren como hormigas sobre los árboles sonoros. Silban como una víbora de plata.
Gatos amuletos de fuego nacidos de los tatuajes de la noche que ronda desde hace siglos al país de los volcanes.
Gato que reanima, fuera de las estaciones, la mirada vegetal. Fuego de perla de agua. Animal perseguido en la frase.
Gatos de fardos azules de noche recargada y que, como las estrellas de la madrugada, se apagan por exceso de realismo.
Gatos emboscados en los follajes de los volcanes de llamas verdes, de la bruma azul siempre insegura, y del hierro replegado en un haz de frases gimientes.
Gatos que antaño llevaban a la escritura diez mil torres verdes, millares de pájaros de precipicio, y la melancolía a la frente ceñida del mecapal.
Gato como la esperanza, hecho de extremos. ¿Está enterrado en las escrituras? ¿Germina? Contra vientos, mareas y lingüistas, se escribe sobre la arena.
¿El gato puede ser "corazón de la flor del sol, cuya mujer es el latido"? ¿O también "mirada de la liana cuando corres detrás la nube"? Es así como lo han visto las miradas emplumadas de la pradera…
Gato tal como es escritura en la arena: gritería de cotorras verdes, pájaro amarillo en llamas, colores en guerra contra el abejaruco de cabeza azul cielo y los cuatrocientos gritos violetas del sinsonte de América.
Gatos presos de los eslóganes de lo felino. Para decir más. En la página de las escrituras: tierras arrasadas.
Gatos pobres (difíciles de imaginar) en exilio sistemático del sentido, como los mendigos sobre las aceras de las grandes ciudades. Gatos que arrastran una sombra herida donde arraiga la flor de la antigua alquimia.
Gatos que rondan alrededor del sentido, encendiéndose y apagándose como las luciérnagas, en las noches de verano.
Gatos entre la verdad separada de toda consistencia mítica y la verdad en su consistencia emocional: la tragedia de las palabras.
Gatos que vigilan la noche trenzando imágenes, emociones, motricidades, partes de visibilidad llevadas por el enunciado, para que el día recomience. Sólo el grito del gallo puede responderles –e incluso alternar las noches.
Gatos signos, resplandores, arcos eléctricos, zarzas ardientes, descargas de luz. Alegría de la energía (¡ay!) quemada por lo que quisiera alumbrar.
Gatos motociclistas. Tras una bajada de espalda, distendida como resorte, se lanzan con destino a la verticalidad. Sobreviven a su imagen, incluso una vez leídos.
Gatos del tiempo de las cerezas regresado (en las escrituras solamente). Nostalgia de la época en que el hombre era bello.
Gatos reproducción de la Creación siempre en lucha contra aquellos que creen ser su lineamiento –y a veces la firma.
Gatos que trepan a los árboles del viento.
Gatos de escuela con los que el sol no envejece, para los que todo está siendo –y no ha sido.
Gatos fósiles de duros silencios. Un dios abandonado viene a murmurar a hora fija.
Gatos silogismos de arañas suspendidas del hilo de la luna.
Gatos de corteza invernal, de ojos nevados, que rondan alrededor del sentido. Raramente lo desentierran. Se trata cada vez de un sentido radical en capítulos de la trastierra de la fragilidad.
Gatos de traducción sin otras referencias que la hierba y los brotes destruidos, conchas y ánforas que ya no se diferencian de lo que durante mucho tiempo ha sobrevivido a la ambigüedad helénica.
Gatos suicidas, siempre dispuestos a saltar para concertar un pacto con la frase. Los reclutamientos psicológicos les dan dientes con los cuales se destruyen.
Gato ausente de la cubierta de los libros de la barricada de Madrid, a reconstituir en las notas a pie de página. Exorcismo cuya necesidad forma parte de los acontecimientos escarnecidos del siglo.
Gato de Chicago con bigotes de delirio negro, que no son sino letras (quemadas en otra parte) que intentan recomponerse.
Gatos de mayo en las calles, una tarde en que París había perdido su grasa. La esbeltez de ser y de escribirse.
Gato armadura atigrada de la vidriera que entalla la imagen sin la cual los motivos faltan.
Gato de escrituras de colosos, con trastierra abandonada, sin ponerse en marcha más que para el ejercicio de la escritura que abre la ruta que conduce al cielo.
Gatos conjuro: sirven para arrastrarse hasta la luz, y de la luz, en los márgenes de los libros.
Gatos de éxodos que se agrietan sobre el hielo de noches sin horas. Pero que siempre saben vencer al espacio, como las campanas al vuelo para decir el nacimiento y la muerte.
Gatos en estado de secreto…
el gato triunfante es declarado en estado de gloria
el gato combatido, en estado de resistencia
el gato perseguido, en estado de enfermedad
el gato acorralado, en estado de secreto
… últimas palabras de un libro futuro que no cerraremos:
- ¿Quiénes somos?
Traducción de Francisco Javier Irazoki

sábado, 8 de abril de 2017

El Bestiario o Cortejo de Orfeo (Selección) - Guillaume Apollinaire - Francia


El Bestiario o Cortejo de Orfeo, que Guillaume Apollinaire publicó en 1911 con los grabados en madera del pintor Raoul Dufy que pueden ver aquí, es un buen ejemplo de su estilo simbolista y de su devoción por la cultura medieval, en la que los Bestiarios (de animales reales o imaginarios) estaban de moda porque narraban en lenguaje simbólico todo tipo de circunstancias humanas, con su correspondiente lección moral. Naturalmente, Apollinaire le da otro enfoque.



IBIS

Oui, j'irai dans l'ombre terreuse
O mort certaine, ainsi soit-il !
Latin mortel, parole affreuse,
Ibis, oiseau des bords du Nil.

EL IBIS

En lo oscuro de la tierra
me dará la muerte asilo.
Latín mortal, palabra que me aterra,
Ibis, el pájaro del Nilo.



LA CARPE

Dans vos viviers, dans vos étangs,
Carpes, que vous vivez longtemps !
Est-ce que la mort vous oublie,
Poissons de la mélancolie.

LA CARPA

Viva el estanque ha de verte
largos años todavía:
olvidada de la muerte,
pez de la melancolía.



LA MÉDUSE

Méduses, malheureuses têtes
Aux chevelures violettes
Vous vous plaisez dans les tempêtes,
Et je m'y plais comme vous faites.

LAS MEDUSAS

Medusas, testas desdichadas
de cabellera violeta:
de la tormenta enamoradas,
os parecéis al poeta.



L'ÉCREVISSE

Incertitude, ô mes délices
Vous et moi nous nous en allons
Comme s'en vont les écrevisses,
A reculons, à reculons.

EL CANGREJO

Incertidumbre, ¡qué placer
cuando contigo yo me alejo
vernos andar como el cangrejo:
retroceder, retroceder!



LE POULPE

Jetant son encre vers les cieux,
Suçant le sang de ce qu'il aime
Et le trouvant délicieux,
Ce monstre inhumain, c'est moi-même.

EL PULPO

Contra el cielo su tinta arroja,
chupa la sangre de lo amado
y deliciosa se le antoja.
Yo soy ese monstruo inhumano.



LA MOUCHE

Nos mouches savent des chansons
Que leur apprirent en Norvège
Les mouches ganiques qui sont
Les divinités de la neige.

LAS MOSCAS

De nuestras moscas la canción,
aprendida en Noruega, viene
de moscas gánicas que son
divinidades de la nieve.



LE HIBOU

Mon pauvre coeur est un hibou
Qu'on cloue, qu'on décloue, qu'on recloue.
De sang, d'ardeur, il est à bout.
Tous ceux qui m'aiment, je les loue.

EL BÚHO

Mi corazón es un búho
que clavan, desclavan, clavan.
Sangro y ardo y me consumo,
pero canto a quien me ama.
Versiones de Ulalume González de León



LE DROMADAIRE

Avec ses quatre dromadaires
Don Pedro d'Alfaroubeira
Courut le monde et l'admira.
Il fit ce que je voudrais faire
Si j'avais quatre dromadaires.

EL DROMEDARIO

Teniendo cuatro dromedarios
Don Pedro de Alfarubeira
Fue por el mundo y lo admiró.
Él hizo lo que hiciera yo
Teniendo cuatro dromedarios.



LA CHÈVRE DU THIBET

Les poils de cette chèvre et même
Ceux d'or pour qui prit tant de peine
Jason, ne valent rien au prix
Des cheveux dont je suis épris.

LA CABRA DEL TIBET

Los pelos de esta cabra, y esos
dorados, el embeleso
de Jasón, nada son al lado
de los que me han enamorado.



LA SAUTERELLE

Voici la fine sauterelle,
La nourriture de saint Jean.
Puissent mes vers être comme elle,
Le régal des meilleures gens.

LA LANGOSTA

Es esta la esbelta langosta,
el alimento de San Juan;
ojalá mis versos, como ella,
de buenas gentes sean el pan.



LE DAUPHIN

Dauphins, vous jouez dans la mer,
Mais le flot est toujours amer.
Parfois, ma joie éclate-t-elle ?
La vie est encore cruelle.

EL DELFÍN

Delfines, jugáis en el mar,
pero las olas son amargas.
¿A veces brota mi alegría?
La vida es siempre despiadada.
Versiones de Otto de Greiff



LE CHAT

Je souhaite dans ma maison :
Une femme ayant sa raison,
Un chat passant parmi les livres,
Des amis en toute saison
Sans lesquels je ne peux pas vivre.

EL GATO

Imagino mi casa:
una mujer que signifique algo
un gato entre los libros
y amigos todo el año.
Porque no puedo convivir sin ellos.
Le Bestiaire, ou Cortège d'Orphée - Francis Poulenc
Gérard Souzay: barítono 
Dalton Baldwin: piano