del vacío depende el movimiento del carro.
Se recoge barro y se moldea,
del vacío depende la utilidad de la vasija.
Se instalan puertas y ventanas en los muros de una casa,
pero del vacío interior depende su utilidad.
Por ello lo que es sirve de posesión,
lo que no es depende de la utilidad.
Traducción de Benjamín Briggent
Sabiduría, inasible la mayoría de las veces... Otras no, del vació depende la captación de esta sabiduría.
ResponderEliminar¡Lo tengo! Uno de mis primeros libros.
ResponderEliminarOjo con lo que viene a decir.
ResponderEliminarA mi el vacío que mas me gusta es el corte de carne argentino...
ResponderEliminarEste tipo si que era sabio, cuánta verdad.
Libro del vacío, de la renuncia, de la inacción como medios para alcanzar la verdad (¿?), libro complejo y abierto. Y bastante confuso.
ResponderEliminarDice la leyenda que el libro se escribió en cañas de bambú, pero un día esas cañas cayeron al suelo y el libro se desordenó. La leyenda añade que solamente el sabio es capaz de volver a ordenarlas y leer el libro como es debido. Estos chinos...
No sé qué traducción tendrás, Marian, hay cientos, en verso y en prosa. Yo tengo tres y la que más me gusta es la de Benjamín Briggent.
ResponderEliminarEsta noche, Gato, haré un vacío a la parrilla, de un solo lado, el lado de la grasa, tres horas hasta chamuscarla, mientras nos comemos una chambota de vegetales y unas achuras, regamos la cálida madrugada con mucho cabernet y Coltrane y saboreamos y paladeamos a la luna "a love supreme, supreme, supreme..."
ResponderEliminarTe debo un vacío, Gato, os lo debo a todos. Los sueños se hacen realidad, como el invierno nunca deja de convertirse en primavera.
Es la de Caridad Díaz Faes. Y aquí va el mismo fragmento.
ResponderEliminarXI
Treinta rayos convergen en el cubo de la rueda;
Y de esta parte, en la que no hay nada, depende la utilidad de la rueda.
La arcilla se moldea en forma de vasos,
Y precisamente por el espacio donde no hay arcilla es por lo que podemos utilizarlos como vasos.
Abrimos puertas y ventanas en las paredes de una casa,
Y por estos espacios vacíos podemos utilizarla.
Así, pues, de un lado hallamos beneficio en la existencia;
De otro, en la no-existencia.
Y a pie de página, por Gonzalo Gonzalvo Mainar:
ResponderEliminarSin espacio no podemos beneficiarnos de la rueda de un carro, ni de una vasija, ni de una casa. Sin rayos, arcilla y paredes no podemos hacer uso del espacio comprendido entre ellos. La existencia y la no-existencia, coexisten y son interdependientes.
Llenos, Carlos, acabaréis pletóricos con esa combinación:)
ResponderEliminarLa boca se me hace agua y los oídos...
ResponderEliminar¿Estoy invitado? ¡Qué bien suena eso de la chambota de vegetales y las achuras, y el Cabernet, y Coltrane...!
ResponderEliminar"El invierno nunca deja de convertirse en primavera." Tú eres poeta "full time".
La traducción de Caridad es explicativa, me gusta como complemento de la de Benjamín. También el pie de página.
ResponderEliminarA mí me gusta más la de Benjamín Briggent por "Por ello lo que es sirve de posesión,
ResponderEliminarlo que no es depende de la utilidad", más que la explicación de "La existencia y la no-existencia, coexisten y son interdependientes", tanto la posesión y la utilidad pertenecen a la existencia, así lo veo.
No existe ninguna posibilidad de que no estés invitado, Juan. Y por supuesto no dejamos afuera a Marian.
ResponderEliminar(Faltaría más:)
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