I have been one acquainted with the night.
I have walked out in rain—and back in rain.
I have outwalked the furthest city light.
I have looked down the saddest city lane.
I have passed by the watchman on his beat
And dropped my eyes, unwilling to explain.
I have stood still and stopped the sound of feet
When far away an interrupted cry
Came over houses from another street,
But not to call me back or say good-bye;
And further still at an unearthly height,
One luminary clock against the sky
Proclaimed the time was neither wrong nor right.
I have been one acquainted with the night.
Conocido de la noche
Yo he sido un conocido de la noche.
He andado en la ciudad bajo la lluvia.
Pasé la última luz de la ciudad.
He contemplado el callejón más triste.
He encontrado al sereno haciendo ronda
y he bajado los ojos y he callado.
Me he quedado de pronto detenido
al escuchar un grito interrumpido,
lejano, procedente de otra calle.
Pero no es ni un saludo ni un llamado.
Más lejos, a una altura fantasmal
un reloj luminoso contra el cielo
dice que el tiempo no es falso ni real.
Yo he sido un conocido de la noche.
Traducción de José Coronel Urtecho y Ernesto Cardenal
Esa poesía de Frost, con esos personajes de ciudad a la hora de los hombres solos... Qué bien suena leído en inglés, con perfección de letra de canción.
ResponderEliminarDigo, una vez leído en español, cuando entendés de qué va el poema, se disfruta más leído en idioma original... Suena a jazz, a atmósfera de ciudad cansada pero despierta, suena a madrugada cargada de tormenta y soledad...
Muy linda reflexión...
EliminarMi inglés no da para mucho, pero vaya, sí, suena a lo que dices, y este es un poema que podríamos suscribir quienes hemos amado la noche, y segimos amándola, aunque la hayamos abandonado porque no nos queda otra.
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