Nube negra (Luis García Montero - Joaquín Sabina, Pancho Varona y Antonio García de Diego)
Cuando busco el verano en un sueño vacío,
cuando te quema el frío si me coges la mano,
cuando la luz cansada tiene sombras de ayer,
cuando el amanecer es otra noche helada,
cuando juego mi suerte al verso que no escribo,
cuando sólo recibo noticias de la muerte,
cuando corta la espada de lo que ya no existe,
cuando deshojo el triste racimo de la nada.
Sólo puedo pedirte que me esperes
al otro lado de la nube negra,
allá donde no quedan mercaderes
que venden soledades de ginebra.
Al otro lado de los apagones,
al otro lado de la luna en quiebra,
allá donde se escriben las canciones
con humo blanco de la nube negra.
Cuando siento piedad por sentir lo que siento,
cuando no sopla el viento en ninguna ciudad,
cuando ya no se ama ni lo que se celebra,
cuando la nube negra se acomoda en mi cama,
cuando despierto y voto por el miedo de hoy,
cuando soy lo que soy en un espejo roto,
cuando cierro la casa porque me siento herido,
cuando es tiempo perdido preguntarme qué pasa.
Nube negra, del álbum Alivio de luto, 2005 - Joaquín Sabina
Nombres impropios (Luis García Montero - Joaquín Sabina, Pancho Varona y Antonio García de Diego)
No se puede afirmar
que me engañaba cuando me mentía.
Se llamaba Osadía
y desde el primer día
tuvo la cobardía de avisar.
Quien tiene siete vidas
y dos ojos de gata callejera
no se va con cualquiera.
De su noche se espera
un broche de promesas incumplidas.
Mejor no equivocarse,
no me pidas jamás lo que no doy,
ya sabes cómo soy
y si quieres me voy
dijo cuando acabó de desnudarse.
Ya ves,
llegar a fin de mes,
no era con ella asunto de dinero.
Se trataba más bien de merecer
un tren de pasajeros,
el tsunami de un mar hecho mujer,
dispuesto en cada ola a renacer.
Se llamaba Herejía,
cómo voy a saber
si me engañaba cuando me mentía.
Maestra en confundir
al diablo y al rey de los altares,
me citaba en los bares
con fuegos malabares
y luego se olvidaba de acudir.
La mañana y la tarde,
qué vaivén entre alarde y agonía,
todo lo confundía
su swing, porque sabía
mirar como un crepúsculo que arde.
Callada por respuesta
cuando jugué al dolor de corazón.
Su boca era un buzón de voz sin compasión
dormido hasta la hora de la siesta.
Ya ves,
llegar a fin de mes
no era con ella asunto de intendencia.
Se trataba más bien de comprender
la pura impertinencia
del sol cuando se cansa de asombrar,
del mostrador a la hora de cerrar.
Se llamaba Ironía
y no puedo jurar
que me engañaba cuando me mentía.
Ya ves,
llegar a fin de mes
no era firmar un parte de sucesos,
se trataba más bien de envejecer
huérfano de sus besos,
con fantasmas que aprenden a
crecer,
abrazos que se mueren por volver.
Se llamaba Utopía,
me gusta imaginar
que me engañó cuando se despedía.
que me engañó cuando se despedía.
Nombres impropios, del álbum Vinagre y rosas, 2009 - Joaquín Sabina
Señor de la noche (Luis García Montero - Joan Manuel Serrat)
Señor compañero,
Señor de la noche,
haz que vuelva su rostro
quien no quiso mirarme.
Que sus ojos me busquen
sostenidos y azules
por detrás de la barra.
Que pregunte mi nombre
y se acerque despacio
a pedirme tabaco.
Señor de la noche,
dios de la barra,
ángel del sí,
sota de copas,
flor del pecado:
reza por mí.
Reza por mí.
Reza por mí.
Reza por mí.
Si prefiere quedarse,
haz que todos se vayan
y este bar se despueble
para dejarnos solos
con la canción más lenta.
Si decide marcharse,
que la luna disponga
su luz en nuestro beso
y que las calles sepan
también dejarnos solos.
Haz que no cante el gallo
sobre los edificios,
que se retrase el día
y que duren tus sombras
el tiempo necesario.
Señor de la noche,
rey de los forajidos,
llévame a los jardines
de la dulce serpiente
y los sueños cumplidos.
Haz que vuelva su rostro
quien no quiso mirarme.
Que sus ojos me busquen
sostenidos y azules
por detrás de la barra.
Que pregunte mi nombre
y se acerque despacio
a pedirme tabaco.
Señor de la noche, del álbum Versos en la boca, 2002 - Joan Manuel Serrat
Luis García Montero
Pedazo de poeta, y, me enteré el otro día por tí, pedazo de letrista.
ResponderEliminarBuen poeta García Montero.
ResponderEliminarCapo poeta letrista, que no todos lo son, sólo los musicales.
ResponderEliminarSí.
ResponderEliminarEsta entrada ha estado en un tris de ser eliminada, no por culpa de García Montero, sino de Sabina. Ocurre que ya estaba programada, y al final de los problemas de Sabina con la Administración son suyos... aunque también nuestros. Ay, Sabina...!
Quítenme ese "de" anterior a "los problemas", por favor.
ResponderEliminarSolamente conocía "Señor de la noche"
ResponderEliminarEstán ahí, pero hay que tener el gusto de reunirlos y preparar una entrada para que podamos disfrutarla tod@s.
Ha sido un placer..., a pesar de lo de Sabina.
ResponderEliminar...Al que voy a enviar un mensaje:
ResponderEliminar¡Ay, Joaquín, Joaquín..., con lo que te queremos! ¿Cómo se te ocurre meterte en la misma mierda en la que se meten algunos de tus amigos/enemigos?
¿La vitola de progre es patente de corso? No sé, pregunto, pero parece ser que nos debes cuatro millones. ¿Cuatro millones es una simple disparidad de criterios con Hacienda, o es un morro que te lo pisas? Porque cuatro millones parece mucha disparidad, sinceramente, y perdona.
A partir de ahora, si te vuelve a dar otra "Pastora Soler" en el escenario, igual no nos creemos nada.
P.S.: Ya sabemos que te debemos mucho -gracias por existir, Sabina-. Te debemos, ni más ni menos, y quedándome corto, la crónica social de todos estos años de democracia, pero, hombre, colabora un poco, no la cagues ahora.
Qué pena!
ResponderEliminarSeguramente no leerá este comentario tuyo, Juan.
Debería hacerlo!
No espero que lo lea, Jose, pero tenía que decirlo.
ResponderEliminarAsiento apenado. Dan ganas de balearse en un rincón, dice un tango.
ResponderEliminarYo no sabía nada hasta hoy, pero después de leer un poquito nada más sobre el tema, y en una primera impresión, me da más mala espina Hacienda (Montoro) que Sabina.
ResponderEliminarCon la que ha estado cayendo (y sigue) últimamente en este país, lo raro es que no nos hayamos baleado ya, Carlos.
ResponderEliminarPuede ser, Marian, y seguramente habrá que poner esto en cuarentena, pero insisto en que una disparidad de cuatro millones de euros parece mucha disparidad.
ResponderEliminarDecía estos días mi paisano Antonio Resines que es más fácil meterse con los artistas que con los ricos. Demagogia, amigo Resines.
Habría que saber exactamente desde cuando Hacienda ha cambiado de criterio respecto a esas Sociedades, porque eran legales; también si es un criterio basado en una norma tributaria escrita y si no es así en qué se fundamenta el cambio.
ResponderEliminarLos criterios de la HP para recaudar no siempre son justos, lo que pasa es que le tenemos miedo y no nos atrevemos a pleitear con ellos, pero no siempre llevan la razón y a veces actúan arbitrariamente. Y quienes se atreven a enfrentarse a ella, que hay casos (pero no interesa promocionarlos a ninguna de las partes), acaban pagando, negociando, lo que finalmente tienen que pagar, que muchas veces es mucho menos de lo que la HP pedía inicialmente. No sé si será este el caso de Sabina. Cuatro millones son muchos euros, pero habría que saber cuántos años le reclaman y la disparidad vendrá por los tantos por cientos (en conflicto) de diferencia.
Si Sabina hubiera defraudado a la HP no lo voy a defender, como no justifico el fraude (probado) del fútbol español o el de Pepito Pérez García. Todos los fraudes o impagos a la hacienda pública son iguales vengan de donde vengan y nos deberían indignar de la misma manera, sin hacer concesiones en el criterio a la hora de valorarlos. Pero todos sabemos que Hacienda no somos todos.
ResponderEliminarPero vamos, en un principio, me fío más de Sabina que de Montoro, pues me da la impresión de que quiere matar dos pájaros de un tiro, cobrar y de paso sembrar la duda para que Sabina (y lo que representa) "defraude" al "pueblo"
Todo esto que dices está muy bien dicho y se agradece, excepto la última frase, que me parece pelín demagógica, lo siento.
ResponderEliminarEn cuanto a lo demás, puedo suscribir lo que dice hoy en "los papeles" Víctor Manuel: "Yo ya no me fío de nadie".
No lo sientas, Charlie, lo has pillado bien, es demagógica, para eso he entrecomillado las dos palabras, pero el fondo es cierto, va a matar dos pájaros de un tiro, esa es mi impresión.
ResponderEliminarYo también suscribo, tristemente, esa frase.
Que alegue lo mismo que la Infanta, o sea, ignorancia financiera...
ResponderEliminarYa lo ha hecho, dijo nada más conocerse la noticia que él de dinero no entiende nada, que se pierde.
ResponderEliminarCosa que puedo creerme, porque yo también lo digo mucho y es verdad, sólo que yo no tengo un duro.
ResponderEliminarQuizá por esa razón fundó la sociedad Ultramarinos Finos, para pagar como empresa, vaya usted a saber.
¿Ha oído bien, señor Montoro? Pues eso, por aquí ni aparezca que no va a sacar ni para pipas.
ResponderEliminar¿Qué lo de Antonio Resines es demagogia?
ResponderEliminar¿Porque no se lo preguntas a la cesada Beatriz Viana y a todos los demás inspectores de hacienda de la oficina técnica de grandes contribuyentes que dimitieron en cascada por el caso cemex?
Y eso no eran 4 millones eran 450, y van ya 300 ceses, el daño que están haciendo va ha ser muy dificil de reparar.
Y ya sé que la "a" en el infinitivo va sin "h", pero es que me pones de los nervios.
ResponderEliminarEsta gentuza sabe que el iva del 21% en cultura recauda menos, pero se la suda porque su objetivo no es recaudar, es acabar con la cultura, porque saben que (como digo en mi entrada de blog) una democracia no es posible en un país sin cultura.
Y son fascistas, quieren acabar con la democracia desde el primer día.
No hace falta que preguntes a Rajoy y compañía que votaron en el referendum de la constitución, ya te lo digo yo.
Se abstuvieron, el cuerpo les pedía el no, pero se lo había pisado Blas Piñar y querían diferenciarse, desde entonces todo su trabajo a sido de demolición.
y esa "a" si va con "h"
ResponderEliminarJoooder!
ResponderEliminarNo voy a contestar nada, lo siento.
Bueno, sí voy a decir una cosita, hombre:
ResponderEliminarLa mejor manera de acabar con la cultura es subvencionar todo tipo de chorradas a los colegas, como hacía tu amigo/enemigo ZP.
Si a eso unimos leyes de educación, donde lo que menos importa es la calidad de la enseñanza, acabamos con la cultura en dos patadas y dejamos al país como un erial.