martes, 28 de febrero de 2012

Haikus/11 - Tomas Tranströmer - Suecia

Carl Larsson (Suecia)
Höpplöshetens vägg…
Duvorna kommer och går
utan ansikten.

Pared de pena...
Palomas van y vienen:
no tienen rostros.


***
Står på balkongen
i en bur av solstrålar –
som en regnbåge.

De pie en el balcón,
esa jaula de sol:
como un arcoiris.


***
Ruggiga tallar
på samma tragiska myr.
Alltid och alltid.

Pinos rajados
en el mismo pantano.
Siempre y siempre.


***
Förbryllande skog
där Gud bor utan pengar.
Murarna lyste.

Bosque asombroso:
Dios sin dinero vive.
Claras murallas.


***
En svartvit skata
springer envist i sick-sack
tvärs över fälten.

Blanca y negra,
terca urraca, en zigzag
va por el campo.

Versión castellana de Roberto Mascaró

Lo entreabierto
La complejidad poética suele asociarse a la retórica. Como si el claroscuro operase por acumulación. Entre los méritos de Tranströmer, Nobel pese a merecerlo, está la refutación de ese prejuicio. Tranströmer accede al misterio por eliminación. Su poesía prescinde del contexto, del énfasis y hasta de él mismo. En este poema, recogido en El cielo a medio hacer, bastan tres puertas con diferentes luces:

Abro la primera puerta.
Es una gran habitación soleada.
Un camión pasa por la calle
y hace vibrar la porcelana.


Ese ruido exterior, ese temblor interior, ocurren simultáneamente. Y apenas requieren la aparición del poeta, bisagra entre ambos.

Abro la puerta número dos.
¡Amigos! Vosotros bebisteis la oscuridad
y os hicisteis visibles.


¡Beber oscuridad para alcanzar la visibilidad! He ahí toda una poética, que se dirige a la claridad pasando por la penumbra.

Puerta número tres. Una estrecha habitación de hotel.
Vistas a un callejón.
Un farol que reluce en el asfalto.
El hermoso residuo de las experiencias.


Ver el mundo a media luz: contemplar lo que sí y lo que no. La poesía nunca es tan evidente como para abrir una puerta de par en par, ni tan pretenciosa como para dejarla cerrada. [Andrés Neuman]

sábado, 25 de febrero de 2012

Cinco estrofas para Thoreau - Tomas Tranströmer - Suecia

Cabaña de Henry David Thoreau
FEM STROFER TILL THOREAU

Ännu en har lämnat den tunga stadens
ring av glupska stenar. Kristallklart salt är
vattnet som slår samman kring alla sanna
flyktingars huvud.
*
I en långsam virvel har tystnad stigit
hit från jordens mitt, att slå rot och växa
och med yvig krona beskugga mannens
solvarma trappa.
*
Foten sparkar tanklöst en svamp. Ett åskmoln
växer stort vid randen. Likt kopparlurar
trädens krökta rötter ger ton och löven
skingras förskrämda.
*
Höstens vilda flykt är hans lätta kappa,
fladdrande tills åter ur frost och aska
lugna dagar kommit i flock och badar
klor na i källan.
*
Trodd av ingen går den som sett en geysir,
flytt från stenad brunn som Thoreau och vet att
så försvinna djupt i sitt inres grönska,
listig och hoppfull.


CINCO ESTROFAS PARA THOREAU

Otro más abandonó el pesado
anillo de la ciudad de voraces piedras. Clara como la sal es
el agua que golpea todas las cabezas de
los verdaderos refugiados.
*
En lento remolino ha subido el silencio
hasta aquí desde el centro del mundo, a enraizarse y crecer
y con frondosa copa sombrear la escalera del hombre, entibiada
por el sol.
*
Negligentemente, el pie golpea una seta. La nube de tormenta
se agranda junto al borde. Como cuernos de cobre
las sinuosas raíces del árbol dan el tono, y las hojas
se dispersan temerosas.
*
La huida salvaje del otoño es su liviano manto,
flameando hasta que, otra vez, llegue la manada de días tranquilos
de helada y ceniza y bañen
las garras en la fuente.
*
Creído por nadie va el que vio un géiser,
huido de aljibe cegado, como Thoreau, y sabe
desaparecer en lo profundo de su verde interior,
astuto y esperanzado.

Versión castellana de Roberto Mascaró

A Tomas Tranströmer le concedieron el premio Nobel de Literatura 2011 por su poesía austera y concreta que ofrece imágenes densas y diáfanas, según la Academia Sueca.

jueves, 23 de febrero de 2012

Ángelus Novus - Walter Benjamin - Alemania

Ángelus Novus - Paul Klee
Hay un cuadro de Klee (1920) que se titula Ángelus Novus. Se ve en él a un ángel al parecer en el momento de alejarse de algo sobre lo cual clava su mirada. Tiene los ojos desencajados, la boca abierta y las alas tendidas. El ángel de la Historia debe tener ese aspecto. Su cara está vuelta hacia el pasado. En lo que para nosotros aparece como una cadena de acontecimientos, él ve una catástrofe única, que acumula sin cesar ruina sobre ruina y se las arroja a sus pies. El ángel quisiera detenerse, despertar a los muertos y recomponer lo despedazado. Pero una tormenta desciende del Paraíso y se arremolina en sus alas y es tan fuerte que el ángel no puede plegarlas... Esta tempestad lo arrastra irresistiblemente hacia el futuro, al cual vuelve las espaldas mientras el cúmulo de ruinas sube ante él hacia el cielo. Tal tempestad es lo que llamamos progreso.

lunes, 20 de febrero de 2012

Giordano Bruno - Enrique Verástegui - Perú

Giordano Bruno - Ettore Ferrari
"Toda potencia de la naturaleza o del espíritu debe formar su opuesto como única condición y medio de su manifestación" (citado por Joyce, Cf. The Critical Writings).

Follajes de Noli
y aire suave de Labor,
Nápoles —fábricas de Nápoles tan llenas de Gramsci
y en Gramsci relampaguea
el aura de Bruno:
Giordano Bruno nacido en 1548, poeta,
filósofo que en el temblor de la duda
encontró la verdad
tan delicado como sombras
de lilas que el viento arrastra —el
saber alejandrino brotó fresco
en el jardín ya florido
de una mente severa.
Tuvo lo que su época le dio (fue clérigo intratable)
mas convino que toda época está en retroceso
y el pasado —¿dónde está?
que no esté arrumado
entre murallas de prejuicio
y largos trámites
burocráticos, la represión,
las relaciones mercantiles.

Oh campo aún velado en nieve espesa
y con ligeros brotes
de verdor: núcleos semánticos
núcleos de meditación
entre pétalos no más desesperados que este abismo
abierto entre el día
y la noche mientras nuestro paso es un siglo
tenuemente vacío levemente extraviado como hipótesis que van
rechazándose y negándose en un texto que a lo a priori
prefirió la luz de lo móvil
y el soñar
y errar en la vida
buscando belleza
y sabiduría = gramática de flores
aunque penumbras del vivir
sin más pobre lumbre
que haber regado un poco
este misterio del verdor
hoy signos sólo
y flores turbias
de un muy viejo manuscrito: el tuyo,
Giordano.
Y 30 años tenías,
vestidos trashumantes
cabellera oscura
y larga: hombrecillo
de rostro moreno
y oscura y rala barba —cuando
insultado y desterrado
vago vagaste vagón perdido como chispa rápida
de un detonante que ya
en la mecha de tu propia expresión
revienta los sentimientos de tu/mi éxodo poético
al sueño —tierra de promisión inhollada.

Milán, Venecia, Niza, compuertas de Génova
que han recibido a tantos extranjeros
te cerraban puertas y persianas
—sus bandos
bien claro (decían) que no debías
pisar sus yerbas
y has dormido al sereno
contemplando la elíptica del cometa en tu estilo
el cabello escarchado la materia infinita
y algún texto de Sedulius Scottus
te complace:

Scriptor sum (fateor), sum Musicus et Orpheus,
sum bos triturans, prospera quaeque volo,
sum vester miles sophiae praeditus armis:
pro nobis nostrum, Musa, rogato patrem...

(y seguiste recordando más versos).

Te amparaba
tu propio desamparo
y cielo infierno: suggetto —á doi contrarii eterno,
Bandito son dal ciel, et dal infierno
están lejos de ti
ni te reciben
vagabundo al llegar el día.

En Londres y París
en Wittemberg al dictar tus clases aprendías
la pesada luz de tus alumnos.
Y Praga te vio volar
como una antorcha de Joan Huss,
Caballería Roja, cerebro de flores en el sueño.

¿Quién decidirá
—pensabas—
entre Aristóteles
y Platón?
¿Quién entre Tomás y Agustín?
¿Entre la forma racional
y la forma ideal
de un mismo lenguaje represivo?
Y ya habíamos decidido
Giordano:
contigo en tus escritos.
No la verdad —no
sino el conocimiento de la causa
en el efecto
y me crucé contigo
en la penumbra
de la antecámara materialista
almácigos tiernos
dialéctica aún suave
como un crepúsculo.
Tu ópera de ligar / desligar
los misterios
y problemas de la física las leyes de la naturaleza
que tu mnemotecnia
dominaba (tu práctica analógica)
te valió el lodo de tu nombre
—ser el brillo
que alumbra este pasado
de hombres que pagaron caro
su arrogante deseo de saber.

Y en Venecia te llevaron al miserable tribunal
del Santo Oficio y te juzgaron
te desnudaron te maniataron te humillaron
y el proceso penoso y largo
duró años: Giordano Bruno
ni transa ni se retracta - no pierde
el nolano
judío errante
la altivez de su verdad.

Lo declaran ateo impío corrompido –lo excomulgan
y viene la condena:
"que sea castigado
con la mayor dulzura posible y sin efusión
de sangre, sine ulla sanguinis effusione"
que en maligna lengua eufemista represiva
y clasicista dictaminaban los inquisidores de siempre
morir quemado vivo
y entonces Bruno replica
ya bellísimo su alto testamento: "más os intimida
pronunciar mi sentencia a vosotros
que a mí el oírla"
y entró sereno en la brasa
lúcido entre las ávidas llamas

Toda época está
en retroceso y todo presente es pasado devorado
en el futuro y aquel 17 de febrero de 1600
Giordano Bruno, poeta,
loco y filósofo que en la duda encontró su verdad
nació para todos
y yo nací con él, yo soy Giordano Bruno.
De Angelus novus (1989)

viernes, 17 de febrero de 2012

Poema de Giordano Bruno a sus verdugos - Italia

Inauguración del monumento a Giordano Bruno en Campo dei Fiori (Roma) - Ettore Ferrari, 1889
Decid, ¿cual es mi crimen? ¿lo sospecháis siquiera?
Y me acusáis, ¡sabiendo que nunca delinquí!
Quemadme, que mañana, donde encendáis la hoguera,
levantará la historia una estatua para mí.
Yo sé que me condena vuestra demencia suma.
¿Por qué?... Porque las luces busqué de la verdad.
No en vuestra falsa ciencia, que el pensamiento abruma
con dogmas y con mitos robados a otra edad,
sino en el libro eterno del Universo mundo,
que encierra entre sus folios de inmensa duración
los gérmenes benditos de un porvenir fecundo,
basado en la justicia, fundado en la razón.
Y bien sabéis que el hombre, si busca en su conciencia
la causa de las causas, el último porqué,
ha de trocar muy pronto la Biblia por la ciencia,
los templos por la escuela, la razón por la fe.
Yo sé que esto os asusta, como os asusta todo,
todo lo grande, y quisierais poderme desmentir.
Más aún, vuestras conciencias, hundidas en el lodo
de un servilismo que hace de lástima gemir...
aún allá, en el fondo, bien saben que la idea,
es intangible, eterna, divina, inmaterial...
Que no es ella el Dios y la religión vuestra
sino la que forma con sus cambios, la historia universal.
Que es ella la que saca la vida del osario,
la que convierte al hombre, de polvo, en creador;
la que escribió con sangre la escena del Calvario,
después de haber escrito con luz, la de Tabor.
Mas sois siempre los mismos, los viejos fariseos,
los que oran y se postran donde los puedan ver,
fingiendo fe sois falsos llamando a Dios, ateos,
¡chacales que un cadáver buscáis para roer!...
¿Cual es vuestra doctrina? Tejido de patrañas;
vuestra ortodoxia, embuste; vuestro patriarca, un rey;
leyenda vuestra historia, fantástica y extraña;
vuestra razón, la fuerza; y el oro vuestra ley.
Tenéis todos los vicios que antaño los gentiles,
tenéis las bacanales, su pérfida maldad;
como ellos sois farsantes, hipócritas y viles,
queréis, como quisieron, matar a la verdad;
Mas... ¡Vano es vuestro empeño!... Si en esto vence alguno,
soy yo, porque la historia dirá en lo porvenir:
"Respeto a los que mueren como muriera Bruno"
Y en cambio vuestros nombres... ¿quién los podrá decir?

¡Ah!... Prefiero mil veces mi muerte a vuestra suerte;
morir como yo muero... no es una muerte ¡no!
Morir así es la vida; vuestro vivir, la muerte.
Por eso habrá quien triunfe, y no es Roma ¡soy yo!
Decid a vuestro Papa, vuestro señor y dueño,
decidle que a la muerte me entrego como un sueño,
porque es la muerte un sueño que nos conduce a Dios…
Más no a ese Dios siniestro, con vicios y pasiones
que al hombre da la vida y al par su maldición,
sino a ese Dios-Idea, que, en mil evoluciones,
da a la materia forma y vida a la creación.
No al Dios de las batallas, sí al Dios del pensamiento,
al Dios de la conciencia, al Dios que vive en mí,
al Dios que anima el fuego, la luz, la tierra, el viento,
al Dios de las bondades, no al Dios de ira sin fin.
Decidle que diez años, con fiebre, con delirio,
con hambre, no pudieron mi voluntad quebrar;
que niegue Pedro al Maestro Jesús, que a mí ante el martirio,
de la verdad que sepa, no me haréis apostatar.
¡Mas basta!... ¡Yo os aguardo! Dad fin a vuestra obra.
¡Cobardes! ¿Qué os detiene?... ¿Teméis al porvenir?
¡Ah!... Tembláis... Es porque os falta la fe que a mí me sobra...
Miradme... Yo no tiemblo... ¡Y soy quien va a morir!...

Giordano Bruno, filósofo, astrónomo, poeta y religioso italiano, fue condenado por la Inquisición por herejía y ejecutado en la hoguera en el Campo dei Fiori de Roma el 17 de febrero de 1600. Bruno se había adherido a la teoría heliocéntrica de Nicolás Copérnico y se había atrevido además a plantear la infinitud del universo y la posibilidad de la existencia de otros mundos como la Tierra.

Quemadme, que mañana, donde encendáis la hoguera,
levantará la historia una estatua para mí.


Efectivamente, en 1889 se inauguró en el mismo lugar de la ejecución una estatua en su honor, obra del escultor Ettore Ferrari. En la base del monumento hay tres bajorrelieves en bronce que representan tres escenas de su vida: disertando en la cátedra de Oxford, compareciendo ante el tribunal de la Inquisición y su ejecución en la hoguera. Al frente hay una placa que reza: A Bruno - Il secolo da Lui divinato, qui dove il rogo arse (A Bruno - El siglo que él adivinó, aquí donde el fuego ardía). Pero el monumento no sólo recuerda a Giordano Bruno sino que además evoca a otros personajes de la historia que también tuvieron enfrentamientos con la Iglesia Católica. Sobre la placa del frente hay dos medallones de bronce rodeados de festones en mármol con los rostros en bajorrelieve de Fray Paolo Sarpi (1552-1625) y Fray Tommaso Campanella (1568-1639) y sobre cada uno de los otros tres lados hay dos medallones idénticos con los rostros de Erasmo de Rotterdam (1466 - 1536), Giulio Cesare Vanini (1585 - 1619), Aonio Paleario (1503 - 1570), Miguel Servet (1511 - 1553), John Wiclef (1320 - 1384) y John Huss (1370 - 1415).

Giordano Bruno:
* Existen un número innumerable de soles,
y un número infinito de tierras que giran alrededor de esos soles.

* Todo este orbe, no estando sujeto a la muerte, y siendo imposibles la disolución y la aniquilación en la Naturaleza, de tanto en tanto se renueva a sí mismo cambiando y alterando todas sus partes. No hay un arriba o abajo absolutos, como enseñó Aristóteles; ninguna posición absoluta en el espacio; sino que la posición de un cuerpo es relativa a las de los otros cuerpos. En todos lados hay un incesante cambio relativo de posición a través del universo, y el observador siempre está en el centro.

* En general, todas las religiones, turban la paz y la serenidad en el hombre, apagan la luz de la razón y no sirven para mejorar las costumbres.

* Vendrá un nuevo y deseado siglo, en que los númenes serán desterrados al Orco y cesará el miedo a las penas eternas.

* De la misma manera que el tiempo es uno, pero en diversos sujetos temporales, así es uno el instante en la diversidad y en la totalidad de las partes del tiempo, como yo soy el mismo que fui, soy y seré, sea aquí en mi casa, en el templo o allí donde me hallare... Porque si no existiese el instante, no existiría el tiempo; y, por tanto, el tiempo, en esencia y sustancia, no es otra cosa que instante. Y bástate esto si eres buen entendedor.

* Gran cosa es, ciertamente, que el tiempo, que no nos alcanza siquiera para las cosas necesarias aun cuando venga celosamente guardado, sea las más de las veces malgastado en cosas superfluas, y hasta viles y vergonzosas.

* No debo ni quiero arrepentirme, no tengo motivo para ello y no sé por qué debo arrepentirme.


Jueves, día 16 del corriente (febrero de 1600)
A las 2 de la noche fue comunicado a la Compañía que por la mañana se debía hacer justicia a un impenitente; y por eso a las 6 horas de la mañana, reunidos los frailes confortantes y el capellán de Santa Úrsula, y dirigiéndose a la cárcel de Torre de Nona, entraron en nuestra capilla y después de rezar, nos entregaron al suscrito condenado a muerte, es decir:

Giordano del quondam Giovanno Bruni, fraile apóstata de Nola di Regno, hereje impenitente. El cual fue exhortado con toda caridad por nuestros hermanos, y mandados llamar dos padres de Santo Domingo, dos jesuitas, uno de la Chiesa Nuova y uno de san Jerónimo, quienes con mucho afecto y doctrina le mostraron su error, estuvo hasta el fin en su maldita obstinación, dando vueltas con su intelecto y su cerebro con mil errores y vanidades. Y tanto perseveró en su obstinación, que fue conducido por los ministros de justicia a Campo dei Fiori, y allí se le desnudó y fue atado a un palo y quemado vivo, acompañado siempre por nuestra compañía que cantaba letanías, y los confortantes lo atendían hasta el último momento para que abandonara su obstinación, con la que al final acabó su miserable e infeliz vida.

Tremate forse piu voi nel pronunciare la sentenza che io nel riceverla.
Tembláis más vosotros al pronunciar la sentencia que yo al recibirla. [Giordano Bruno]

martes, 14 de febrero de 2012

Poesía lírica del Antiguo Egipto

Tumba de Nakht - Arte egipcio
(Diferentes períodos)

Brillante de virtud, de tez clara,
con ojos de mirada pura,
con unos labios que hablan dulcemente,
ella no pronuncia ni una palabra de más.

De cuello esbelto, de pecho radiante,
tiene una cabellera de verdadero lapislázuli.
Sus brazos superan el oro,
sus dedos son pétalos de loto.

Sobre un lomo ancho tiene finas caderas
y sus piernas le dan su belleza.
Su andar es noble cuando avanza.
Ella me arrebata el corazón con su saludo.

***
El amor de mi amada me aguarda en la otra orilla.
Hay un cocodrilo al acecho, pero cruzaré sin miedo las aguas.
Es tu amor lo que me hace fuerte y conjura los cocodrilos.
Cuando te veo llegar mi corazón salta de júbilo,
Mis brazos quieren estrecharte.
Y si beso tus labios abiertos
Me siento embriagado y floto en un ensueño.


***
Me retiraré contigo a los árboles del jardín.
Te observaré enamorada cuando contemples mi rostro.
Mis brazos son guirnaldas de flores
y un fino aceite hace brillar mis cabellos.
Cuando estoy entre tus brazos
soy como una princesa del Señor de ambos países

***
¡Ay de mí, hace siete días que no veo a mi amada!
La melancolía me abate sin piedad.
El corazón se ha vuelto lento y pesado,
hasta de vivir me he olvidado.
Los médicos se acercan con buenas intenciones
pero sus remedios de nada me valen.
Los magos no encuentran recursos,
Mi enfermedad no puede ser descubierta.
Mi amada princesa es para mí el mejor de los remedios.
Para mí es mejor que una fórmula mágica,
su presencia es mi amuleto.
Cuando abre los ojos, mi cuerpo rejuvenece,
Cuando habla, me siento fuerte,
Cuando la tomo entre mis brazos, se aparta de mí todo mal.
¡Hace ya siete días que se alejó de mí!


***
Cuando la acaricio
y ella me abre sus brazos,
me siento como un hombre en el país del incienso
que está sumergido en perfume

domingo, 12 de febrero de 2012

Poesía en forma de pájaro - Jorge Eduardo Eielson - Perú


                 azul
            brillante
            el Ojo el
  pico anaranjado
            el cuello
            el cuello
            el cuello
            el cuello
            el cuello
            el cuello
            el cuello herido
            pájaro de papel y tinta que no vuela
            que no se mueve que no canta que no respira
            animal hecho de versos amarillos
            de silencioso plumaje impreso
            tal vez un soplo desbarata
            la misteriosa palabra que sujeta
            sus dos patas
                       patas
                       patas
                       patas
                       patas
                       patas
                       patas
                       patas
                       patas a mi mesa.

viernes, 10 de febrero de 2012

I beg your pardon - Salvador Espriu - España

Humanity - M. C. Escher
Meditació, amb alguns rodolins,
entorn de la teoria atòmica, tal com
ve al·ludida als periòdics.


Quan el centre del món
no ets ben bé tu
(per més que en tinguis la il·lusió),
si et desvetllaven enmig de la nit,
no vulguis preguntar-te per què vius:
distreu-te rosegant l'ungla d'un dit.

Quan el centre del món
queda tan lluny
de tu
que honestament
comences a saber que no ets ningú,
para't per un moment
i venta al primer nas un cop de puny.

Problemes cada volta més esquius
et vénen a torbar la dolça son.
Sols et faltava ja, pel que tu dius,
llucar que no ets del tot centre del món.

Parent de Badalona o d'Istanbul,
tant si ets actiu com si fas el gandul,
en aquest nostre món sense demà
és molt difícil de guanyar-te el pa.
No et donaré ni el més petit consol:
et volaran un dia qualsevol.
Però entretant evita alguns transtorns,
posant-te ben cordats els pantalons.

*****
Meditación, con ciertos ripios, en
torno a la teoría atómica, tal como
se la alude en los periódicos.


Cuando el centro del mundo
no eres exactamente tú
(por más ilusiones que te hagas),
si te despertasen en mitad de la noche,
no quieras preguntarte por qué vives:
distráete royéndote la uña de un dedo.

Cuando el centro del mundo
queda tan lejos
de ti
que honestamente
empiezas a comprender que eres nadie,
detente un momento
y arréales, a las primeras narices, un puñetazo.

Problemas cada vez más esquivos
vienen a turbarte el dulce sueño.
Ya sólo te faltaba, por lo que dices,
descubrir que no eres exactamente el centro del mundo.

Vecino de Badalona o de Estambul,
tanto si eres activo como si eres gandul,
en este nuestro mundo sin mañana
es muy difícil que ganes tu pan.
No te daré el más mínimo consuelo:
un día cualquiera te volarán.
Mas entretanto evita algunos trastornos
abrochándote muy bien los pantalones.
Versión de José Batlló

Raimon y La Trinca interpretan I beg your pardon, con música de Raimon.

jueves, 9 de febrero de 2012

La realidad exige... - Wislawa Szymborska - Polonia

Jacek Yerka (Polonia)
La realidad exige
que lo digamos bien claro:
la vida sigue su curso.
Sucede así en Cannas y en Borodinó,
en los llanos de Kosovo y en Guernica.

Hay una gasolinera
en una pequeña plaza de Jericó,
hay bancos recién pintados
cerca de Bila Hora.
Las cartas van y vienen
entre Pearl Harbor y Hastings,
pasa un camión de muebles
bajo la mirada del león de Queronea
y solo un frente atmosférico amenaza
los florecientes jardines cercanos a Verdún.

Hay tanto de Todo
que lo que hay de Nada queda muy bien cubierto.
De los yates de Accio
llega la música
y en la cubierta, al sol, bailan las parejas.

Pasan siempre tantas cosas
que seguro tienen que pasar en todas partes.
Donde hay piedra sobre piedra
hay un carro de helados
cercado por los niños.

Donde estaba Hiroshima
de nuevo está Hiroshima
y se siguen produciendo
objetos de uso cotidiano.

No le faltan encantos a este hermoso mundo
ni tampoco amaneceres
para los que merece la pena despertar.

En los campos de Macejowice
la hierba es verde,
y en la hierba, como pasa en la hierba,
la escarcha, transparente.

Quizá no haya un lugar que no haya sido un campo de batalla,
los aún recordados,
los hoy ya olvidados,
bosques de cedros y bosques de abedules,
nieves y arenas, pantanos irisados
y barrancos de negro fracaso
donde en caso de urgencia
satisfacemos ahora nuestras necesidades.

Qué moraleja sale de todo esto: parece que ninguna.
Lo que de verdad sale es la sangre que seca rápida
y siempre algunos ríos, algunas nubes.

En esos desfiladeros trágicos
el viento se lleva los sombreros,
y es inevitable:
la imagen nos da risa.
Versión de Abel Murcia

lunes, 6 de febrero de 2012

Descubrimiento - Wislawa Szymborska - Polonia

Monika Grygier (Polonia)
Creo en el gran descubrimiento.
Creo en el hombre que hará el descubrimiento.
Creo en el terror del hombre que hará el descubrimiento.
Creo en la palidez de su rostro,
la náusea, el sudor frío en su labio.

Creo en la quema de las notas,
quema hasta las cenizas,
quema hasta la última.

Creo en la dispersión de los números,
su dispersión sin remordimiento.

Creo en la rapidez del hombre,
la precisión de sus movimientos,
su libre albedrío irreprimido.

Creo en la destrucción de las tablillas,
el vertido de los líquidos,
la extinción del rayo.

Afirmo que todo funcionará
y que no será demasiado tarde,
y que las cosas se develarán en ausencia de testigos.
Nadie lo averiguará, no me cabe duda,
ni esposa ni muralla,
ni siquiera un pájaro, porque bien puede cantar.

Creo en la mano detenida,
creo en la carrera arruinada,
creo en la labor perdida de muchos años.
Creo en el secreto llevado a la tumba.

Para mí estas palabras se remontan por encima de las reglas.
No buscan apoyo en ejemplos de ninguna clase.
Mi fe es fuerte, ciega y sin ningún fundamento.
Versión de Gerardo Beltrán

Wislawa Szymborska, Premio Nobel de Literatura 1996, falleció el miércoles día 1 de Febrero a los 88 años. Descanse.

viernes, 3 de febrero de 2012

Hay que vivir sin imposturas - Boris Pasternak - Rusia

Lago - Isaac Levitan (Rusia)
Hay que vivir sin imposturas
Vivir de modo que con el tiempo
Nos lleguemos a ganar el amor del espacio,
Y oigamos la voz del futuro.

Hay que dejar blancos
En el destino y no en el papel
Y en los márgenes anotar
Pasajes y capítulos de la vida entera.

Debemos sumirnos en el anónimo
Y ocultar en él nuestros pasos
Tal como se oculta el paisaje
Tras una niebla espesa.

Otros siguiendo tus huellas frescas
Recorrerán tu camino palmo a palmo,
Pero tú mismo no debes distinguir
La derrota de la victoria
No debes renunciar ni a una brizna de ti mismo.

Tú debes estar vivo.
Solamente vivir
Hasta el final.
Versión de Gabriel Barra

Sonata para piano en Si Menor - Boris Pasternak
Hiroaki Takenouchi

Dedicado a Jose, que me recordó al gran autor ruso.

miércoles, 1 de febrero de 2012

Nadie vuelve a Ítaca - Antonio Casares - España

Ulises y las sirenas - Museo Nacional del Bardo - Túnez
Has regresado, tras un largo viaje
por los ignotos caminos del mundo,
hasta el mismo lugar desde el que un día
partiste para cumplir tu destino,
pero ya nada es ni será lo mismo,
ni tú mismo eres aquel que eras,
de alguna forma eres un apátrida:
no hay patria donde habite tu espíritu
atormentado por la errancia continua,
no hay patria para aquel que sueña
con un mundo en el que no existan patrias.
Ìtaca sólo existe en tu memoria
de manera imprecisa, como algo
que no se corresponde con tu sueño
antiguo de tener un ideal,
y Penélope ya no te reconoce,
nadie te reconoce, ni tú mismo
sabes por qué ahora te llamas Nadie.
No es Ítaca la isla sino tú,
isla perdida en un mar infinito,
alma que sufre todos los naufragios,
Tampoco habrá, aunque ello no te importe,
Homero o Virgilio que te cante
como al héroe de una epopeya:
una vida vulgar como la tuya
no es merecedora de un mal verso,
¿quién se atreverá a llamarla odisea?
No habrá un Joyce, ni un Kavafis, ni un poema
que testifique sobre tu existencia
o deje alguna huella de tus huellas,
es vana pretensión que lo pretendas
o que no lo pretendas nada importa.
Y pronto, cuando vuelvas a marcharte
de ese lugar que no te pertenece,
sombra invisible de un mito abolido,
nadie saldrá para decirte adiós,
ni nadie llorará por tu ausencia,
ni tú tampoco llorarás por nadie.
Así que mira bien ese paisaje
que un día fue tuyo, o creíste tuyo,
el vago espejo en el que te buscabas
y en el que ya nunca te encontrarás,
y dile adiós a esa rota ilusión
que llamas Ítaca y no es más que un nombre,
la imagen fiel y cruel de tu fracaso,
como si nunca te hubieras ido,
como si nunca hubieras regresado,
como si nunca fueras a volver,
como si Ítaca no existiese
o solo hubiese sido un dulce sueño
en el abismo de tu corazón,
es la hora de partir, no te demores,
despídete, despídete de Ítaca,
porque ahora, no lo dudes, eres Nadie,
aunque sigan llamándote Ulises,
aunque sigas llamándote Antonio.