Ne dites pas : la vie est un joyeux festin;
Ou c'est d'un esprit sot ou c'est d'une âme basse.
Surtout ne dites point : elle est malheur sans fin;
C'est d'un mauvais courage et qui trop tôt se lasse.
Riez comme au printemps s'agitent les rameaux,
Pleurez comme la bise ou le flot sur la grève,
Goûtez tous les plaisirs et souffrez tous les maux;
Et dites : c'est beaucoup et c'est l'ombre d'un rêve.
No digáis...
No digáis que la vida es un festín alegre;
Lo dice un alma tonta o bien un alma baja.
No digáis sobre todo: es desdicha sin fin;
Lo dice un alma débil que temprano se cansa.
Reíd como las ramas en primavera agítanse,
Llorad como los vientos o la ola en la playa,
El placer y el dolor padeced y gozad; y decíd:
Es mucho todo esto y es la sombra de un sueño.
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Fragmentos de 'Manifiesto del Simbolismo'
Enemiga de la enseñanza, de la declamación, de la falsa sensibilidad, de la descripción objetiva, la poesía simbolista busca vestir la Idea de una forma sensible, que, no obstante, no sería su propio objeto, sino que, al servir para expresar la Idea, permanecería sujeta. La Idea, a su vez, no debe dejarse privar de las suntuosas togas de las analogías exteriores; pues el carácter esencial del arte simbólico consiste en no llegar jamás hasta la concepción de la Idea en sí. Así, en este arte, los cuadros de la naturaleza, las acciones de los hombres, todos los fenómenos concretos no sabrían manifestarse ellos mismos: son simples apariencias sensibles destinadas a representar sus afinidades esotéricas con Ideas primordiales. [...] Para la traducción exacta de su síntesis, el simbolismo necesita un estilo arquetípico y complejo: limpios vocablos, el período que se apuntala alternando con el período de los desfallecimientos ondulantes, los pleonasmos significativos, las misteriosas elipses, el anacoluto en suspenso, tropo audaz y multiforme. [...]
Lo dice un alma tonta o bien un alma baja... Reíd como las ramas en primavera agítanse...
ResponderEliminarCuánta belleza! Y qué decir de la obra que elegiste para ilustrar, Émile Bernard, nunca del todo valorado y gran amigo de Vincent.
Sí, hay una interesante correspondencia de Bernard con Van Gogh. Y con Cézanne también, pero yo las que conozco son las cartas entre Bernard y Van Gogh.
ResponderEliminarExtracto de una carta de Van Gogh a Émile Bernard, 1888:
ResponderEliminar"¿Conoces un pintor llamado Vermeer que, por ejemplo, pintó una bella dama holandesa embarazada (Dama en azul). La paleta de este singular pintor es: azul, amarillo limón, gris perla, negro, blanco. En sus escasos cuadros aparecen, en rigor, todas las riquezas de una paleta completa; pero la disposición amarillo limón, azul pálido, gris perla es en él tan característica como lo son para Velázquez el negro, el blanco, el gris y el rosa..."
Otro, 1888:
"Otros pueden manifestar mayor lucidez que yo en relación con los estudios abstractos, y sin duda tú puedes contarte entre éstos, lo mismo que Gauguin... y quizá yo mismo cuando sea viejo.
Pero, mientras tanto, sigo viviendo de la naturaleza. Exagero, cambio a veces la intención; pero en definitiva no invento nunca la totalidad del cuadro, por el contrario lo encuentro ya hecho, aunque debo desentrañarlo en la naturaleza."
"...No invento nunca la totalidad del cuadro, por el contrario lo encuentro ya hecho, aunque debo desentrañarlo en la naturaleza."
ResponderEliminarJamás leí nada de Émile. Y lo peor es que ni lo he buscado. Qué pérdida!
Además de la belleza en la composición hay belleza filosófica. Sabios consejos.
ResponderEliminarComo ya sabréis las pinturas de Van Gogh se están deteriorando, sobre todo sus amarillos, que se vuelven marrones. Por lo visto es un pigmento que llevaba el tipo de pintura que se utilizaba en la época. Lo escuché en la radio hace unos días, pero debe suceder desde hace tiempo.
ResponderEliminarSí, lamentablemente oí eso o lo leí en algún lado, y espero que ya algo estén haciendo al respecto, creo que también oí o algo me dijeron sobre eso, o lo soñé, y en tal caso espero que lo hagan realidad. No es posible que lleguen a Marte o a un asteroide y no puedan proteger el trabajo de Vincent, el trabajo al que se devocionó, su obra, con lo que amaba él a sus colores…
ResponderEliminarPrepárate como pa estazar, que voy a coger el tren....
ResponderEliminarTú mismo.
ResponderEliminarAmaba tanto los colores, Carlos, que experimentó muchas mezclas con las pinturas y otros componentes, por lo que parece, hasta que encontraba el que buscaba. De ahí la dificultad de encontrar qué ha fallado exactamente.
ResponderEliminarEntiendo, pero hay que salvar su obra. Debieran destinarse todos los recursos y esfuerzos para lograrlo. Perderla sería una desgracia. Convengamos que debiéramos estar en condiciones de poder hacerlo si tenemos en cuenta los avances científicos y biotecnológicos y químicos y etcétera, etcétera. Se entiende adonde apunto.
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