en ayunas la Zorra iba cazando.
Halla una parra, quédase mirando
de la alta vid el fruto que pendía.
Cansábala mil ansias y congojas
no alcanzar a las uvas con la garra,
al mostrar a sus dientes la alta parra
negros racimos entre verdes hojas.
Miró, saltó y anduvo en probaduras;
pero vio el imposible ya de fijo.
Entonces fue cuando la Zorra dijo:
"No las quiero comer. No están maduras".
No por eso te muestres impaciente
si se te frustra, Fabio, algún intento;
aplica bien el cuento
y di: No están maduras, frescamente.
Altas rimas y moralejas...
ResponderEliminarSi alguien quiere enterarse.
ResponderEliminar¿Lo dices por mi?
ResponderEliminarEsa fábula es de Esopo de Tracia, fue recopilada primero por Demetrio de Falero, luego por Fedro, Babrio, Jean de La Fontaine y Félix María Samaniego.
ResponderEliminarSí, prácticamente todas las fábulas ya estaban en Esopo, que por cierto se duda aún si existíó, y si las fábulas conocidas como de Esopo no son más que una recopilación de fábulas populares. Sea como fuere, las mismas fábulas las encontramos en todos los autores que citas y en unos cuantos más.
ResponderEliminarNaturalmente que no lo digo por ti, Gato, lo digo por APR, entre otros.
ResponderEliminarO sea, por el innombrable de Solares...
ResponderEliminarXacto. Y alguno más que no vamos a nombrar, que tampoco merecen tanta publicidad.
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